Salas de bombas
Cómo funcionan
Las estaciones de bombeo son las encargadas de suministrar el agua, en presión y caudal, requerida por los sistemas de protección contra incendios.
Los grupos de presión transmiten al agua la energía mecánica aportada por el motor. El conjunto motor-bomba suele estar montado sobre una bancada de perfiles laminados. Los grupos motor-bomba pueden adoptar una gran variedad de formas y disposiciones, dependiendo de los requisitos de cada proyecto y de los criterios de fabricación.
Las bombas normalmente utilizadas en aplicaciones contra incendios son de tipo centrífugo, pudiendo además ser:
• Cámara partida horizontal, que suelen disponer de sus conexiones de aspiración e impulsión en planos paralelos.
• Cámara partida vertical, que suelen disponer de sus conexiones de aspiración e impulsión en planos perpendiculares.
• A su vez pueden ser de una o más etapas, según las condiciones de cada proyecto.
• Eje vertical y bomba sumergida, que suelen emplearse cuando el nivel de la reserva de agua está a 2 metros o más por debajo del motor.
Los motores de accionamiento suelen ser eléctricos o de combustión interna. La unión motor-bomba suele hacerse por medio de un acoplamiento elástico y, normalmente, el motor y la bomba giran a la misma velocidad. Solo en ciertos casos se instala entre ellos un cabezal de engranajes con lo que el motor y la bomba giran a velocidades diferentes.
Las estaciones de bombeo contra incendios normalmente están formadas por dos bombas (principal y reserva), pudiendo disponer de tres o más. La razón de disponer de bomba principal y de reserva es para prevenir que una sola avería o fallo simple pueda dejar al sistema de bombeo inoperante.
Si se dispone de dos bombas cada una es para suministrar el 100% de presión y caudal requerido por el sistema. En este caso los motores de accionamiento suelen ser:
• Ambos eléctricos, si se dispone de dos fuentes de suministro independientes.
• Uno eléctrico y otro de combustión interna. Esta es la disposición más común.
• Ambos de combustión interna. Se utiliza si no hay potencia eléctrica disponible.
Si se dispone de tres bombas cada una es para suministrar el 50% de caudal y el 100% de presión; o dos del 50% del caudal y la tercera del 100% siempre al 100% de la presión o combinaciones similares. Lo que se pretende es tener una gran fiabilidad en el suministro de agua en cualquier condición de suministro eléctrico.
En todos los casos indicados las bombas están montadas en paralelo de forma que, por medio de las válvulas de maniobra, se pueden aislar del sistema para reparación o mantenimiento.
Con cualquiera de las disposiciones anteriores se usa una pequeña bomba auxiliar (bomba Jockey), montada en paralelo, accionada por motor eléctrico, de arranque y parada automática. Se utiliza para mantener la presión en el sistema, reponiendo pequeñas fugas.
